Entre nutracéuticos y dietética china

El concepto de salud ha cambiado constantemente a lo largo del tiempo, para llegar a asumir, hoy en día, un significado mucho más amplio que asocia estrechamente una condición de ausencia de patologías a un estado de bienestar “global” de la persona.
Hoy en día todos somos más conscientes de cómo la salud no consiste en la simple ausencia de enfermedad, sino que depende de una serie de factores inherentes a la totalidad de nuestras vidas.
En los últimos años se ha destacado cada vez más cómo el entorno externo y, sobre todo, la nutrición son capaces de influir en nuestra salud y, en consecuencia, en nuestro bienestar.
La salud se construye en primer lugar en la mesa, basada en los alimentos que comemos.
La alimentación no es sólo un medio de subsistencia. La alimentación es cada vez más saludable y un poderoso medio a nuestra disposición, para salvaguardar el cuerpo para mantener un estado de bienestar.
La importancia y el estrecho vínculo del binomio “nutrición y buena salud” también es subrayado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que considera que la nutrición adecuada y la salud son derechos humanos fundamentales.
Por lo tanto, comer no solo sirve para reponer energía y reservas estructurales, sino que también sirve para influir en los sistemas reguladores generales del organismo (sistema nervioso, inmunológico, endocrino), incluido el ADN, como ha demostrado la epigenética.
Somos los co-creadores de lo que somos, definitivamente protagonistas activos; el destino escrito en el ADN de cada individuo ya no es inevitable, sino que puede ser influenciado por estilos de vida más o menos correctos. Y los cambios pueden transmitirse a las generaciones posteriores.
A raíz de estos estudios, en los últimos años, han nacido nuevas disciplinas que combinan ciencia y nutrición y utilizan las metodologías e instrumentos más modernos para identificar moléculas alimentarias que pueden reducir el riesgo de aparición de enfermedades y caracterizar sus mecanismos de acción: los nutracéuticos es uno de ellos.
Por lo tanto, la nutrición juega un papel decisivo en nuestro bienestar.
Intentemos profundizar en este tema partiendo del concepto de salud tal y como ha ido cambiando a lo largo de los años para llegar a entender por qué la nutrición es tan importante gracias a los aportes de la epigenética y los nutracéuticos, para llegar a confirmar lo que la dietética china ha estado afirmando durante milenios.
Concepto de “salud” en la historia
Durante milenios la enfermedad ha sido considerada un fenómeno mágico-religioso.
En la antigua Grecia, con Hipócrates, la medicina se basaba en la observación. Posteriormente, las concepciones de salud y enfermedad permanecieron “no científicas” hasta los últimos siglos.
En sus inicios, la medicina científica (finales del siglo XVIII), reflejó un modelo biomédico.
Coincidiendo con el nacimiento de la sociedad industrial, el modelo biomédico se ocupó más de la enfermedad que de la salud y las condiciones de vida y de trabajo de la población.
En el siglo XX se desarrolló una especialización exasperada, por la cual el individuo incluso se identificaba con una sola “parte”, “un órgano”, negando así al individuo como persona.
Un punto de inflexión histórico llegó en 1948 con la definición, por parte de la OMS, de la salud como “un estado de bienestar físico, mental y social y no solo como la ausencia de enfermedades o dolencias”.
Este concepto ha permitido el abandono de la interpretación “medicalista” del bienestar.
El concepto de salud global que está tomando forma gradualmente, trae consigo una concepción de la persona como una unidad psicofísica, interactuando con el entorno circundante, que es el requisito previo para “una promoción y educación a la salud” y a una “medicina de la persona” en su totalidad.

 

Epigenética

Alguna vez se creyó que nuestra herencia genética estaba rígidamente establecida desde el momento de la concepción y que nada podría cambiarla a lo largo de los años. Recientemente, la investigación ha demostrado que la expresión génica puede verse influenciada por estímulos ambientales como la nutrición, el estrés y las emociones.
El ADN que hemos heredado mantiene su secuencia, pero factores como la nutrición y las sustancias que producimos como consecuencia de las emociones y el estrés, determinan la expresión del gen que hemos heredado y la consiguiente posible manifestación de patologías.

Los factores que influyen en la expresión génica cambian todos los días en función de lo que comemos, los suplementos que tomamos, los hábitos de fumar, la exposición a toxinas, el ejercicio o el estrés.
Estas señales epigenéticas nos pertenecen en gran medida en términos de elecciones. La nutrición es probablemente la señal más impactante. Si pensamos en una vida de unos 80 años, una persona termina comiendo 30-40 toneladas de alimentos.
Imaginamos que ese alimento no son solo calorías sino signos de transformación genética, que, si están equivocados, guían el cuerpo-mente hacia la enfermedad.
Estamos “mal” diseñados para comprender las consecuencias a largo plazo de nuestras elecciones a corto plazo. Esta es una de las limitaciones del ser humano que, calibrado para buscar la supervivencia, no piensa ahora en el daño que le hará a sí mismo y al medio ambiente a largo plazo.
En esta perspectiva, los alimentos también tienen la capacidad de regular o desregular las señales epigenéticas dependiendo de las elecciones que cada uno haga.
Los alimentos representan no solo un suministro de energía y macronutrientes, sino también un suministro fenomenal de señales bioquímicas, que pueden ser devastadoras si estas señales son contrarias a las necesidades de las células, o, por el contrario, pueden ser protectoras si las señales bioquímicas son las correctas.
Si “somos lo que comemos”, como decía Feuerbach, la nutrición juega un papel decisivo en nuestro bienestar. A menudo, sin embargo, no “sabemos lo que comemos” y la calidad de nuestra vida se ve afectada, con graves consecuencias para el cuerpo.
Aquí es donde entra Nutracéutico.

 

¿Qué son los nutracéuticos?

Los nutracéuticos es la rama de la medicina, que estudia la acción beneficiosa y curativa de los alimentos sobre la salud humana.
Nutracéuticos, etimológicamente deriva de la fusión de los términos “nutrición” y “farmacéutico”, para indicar la disciplina que investiga todos los componentes o principios activos de los alimentos, con efectos positivos sobre la salud y para la prevención y tratamiento de enfermedades.
En lugar de “comer” y luego curarse a sí mismo, ¡aquí está cómo curarse comiendo!
Por lo tanto, el papel de los nutracéuticos se vuelve decisivo para aquellos que quieren saber en detalle qué sucede en el cuerpo cuando comen, qué principios se activan y con qué consecuencias reales para la salud.

“Deja que la comida sea tu medicina y deja que tu medicina sea comida”. Esta es una declaración de hace 2500 años, de Hipócrates (médico griego padre de la medicina).

El producto nutracéutico, o complemento alimenticio, tiene una doble alma: tanto la del alimento como la del medicamento.
La nutrición, hoy en día se vuelve a considerar, como en la antigüedad, una forma de terapia y representa uno de los aspectos de mayor importancia para el logro y mantenimiento de un buen estado de salud.
En medicina, hoy en día, no podemos ignorar la importancia del papel desempeñado por los alimentos en el determinismo de las condiciones de salud y los estados de enfermedad.
Los productos nutracéuticos son derivados alimentarios a los que, además del valor nutricional básico, se atribuyen uno o más beneficios adicionales.
Analicemos las dos categorías principales: suplementos dietéticos y alimentos funcionales.

1. Suplementos dietéticos. Estos son suplementos alimenticios reales.
En Italia, los complementos alimenticios son aquellos “productos alimenticios destinados a completar la dieta común y que constituyen una fuente concentrada de nutrientes, como vitaminas y minerales, u otras sustancias que tienen un efecto nutricional o fisiológico, en particular, pero no exclusivamente (aminoácidos, ácidos grasos esenciales, fibra y extractos de origen vegetal), tanto monocompuesto como multicompuesto, en formas predosificadas”.
2. Alimentos funcionales. Son alimentos “diseñados” para permitir a los consumidores introducir alimentos ricos en moléculas útiles (aunque cerca del estado natural) en lugar de suplementos fabricados en forma líquida o en cápsulas, etc. Entre los alimentos con características funcionales, además del yogur, se encuentran, sobre todo, las frutas y verduras, que son ricas en antioxidantes.

La leutina, por ejemplo, que es útil para la vista, la encontramos en las espinacas, el repollo, el brócoli y los huevos. Curcumina en curry y pigmento amarillo del azafrán. En las legumbres tenemos isoflavonas. La levadura de cerveza contiene aminoácidos, carbohidratos, proteínas, minerales y vitaminas.

Sigue…..

Bibliografía:
https://it.wikipedia.org/wiki/Salute
http://www.lifeme.it/2016/04/cosa-epigenetica-pensieri-emozioni-ambiente-influenzano-cellule-dna-geni
http://www.geneticaebenessere.com
http://scuolatao.com
http://www.move-europe.it/Salute
http://www.benessere.com/dietetica/diecin/basi_diecin
http://www.torinoscienza.it/articoli/non_tutto_e_gia_scritto_nel_nostro_patrimonio_genetico
http://www.my-personaltrainer.it/alimentazione/nutraceutica
http://www.cure-naturali.it/nutraceutica/2123/alimenti-nutraceutici

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